"Cuando la Luna y el Sol se vieron" por Belkis Cima

 





     Cuando la Luna y el Sol se vieron por primera vez quedaron impactados y en silencio se acompañaron.

     Él pensó que ella era todo lo que pacientemente aguardó y que al fin podría disfrutar de la mágica experiencia de vivir el amor.

    La Luna, fiel solitaria, ya no esperaba nada, simplemente estaba. Nunca dijo si amaba o si alguna vez había sido amada.

    El Sol con su galantería un día la conquistó. Le enseñó que con amor todo transcurre mejor. Le prometió amarla cada día un poquito más permitiendo que la pasión los embriagara a los dos.

     Ávida de sentirse amada y poder amar, la grácil Luna aceptó.

     Todo se fue manifestando entre el halo de estos amantes del amor.

     Él le enseñó que un simple guiño basta para dar al otro seguridad y se quedó con la sonrisa que a su corazón atrapó.

     El Sol obtuvo su anhelo y como siempre resplandeció.

     La luna avezada a su presencia junto a él brilló.

    Aquel día se hizo noche y el sol se ocultó aunque de otra perspectiva continúa irradiando su luz.

    La Luna, fiel solitaria, luce  destellos que su amor le impartió y por siempre se sentirá amada por ese Sol que tanto la iluminó.

     Si alguna vez te sentiste Luna o el gran Sol, sabrás que el amor todo lo puede y que siempre deja un resplandor.

Comentarios

Sonia Zoja dijo…
Cuánta dulzura!!!! Es así, el amor, como el Sol, deja su resplandor en quien lo recibe!!!!
Bello texto!!!! 💓💓💓

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